Los cannabinoides más famosos son el tetrahidrocannabinol (THC) y el cannabidiol (CBD). El THC es más conocido por sus propiedades altamente inductoras y que alteran la mente, y el aceite de CBD está ganando popularidad rápidamente por su potencial para aliviar los problemas de salud del huésped. Pero hay más cannabinoides que solo THC y CBD.
De hecho, se cree que hay al menos unos cientos de cannabinoides diferentes que se encuentran en la planta de cannabis y cada uno se comporta de manera un poco diferente en el cuerpo humano. Si ha estado considerando un producto de aceite de CBD de espectro completo para obtener los beneficios de toda la planta de cáñamo a través del efecto séquito, entonces debe comprender estos cannabinoides menos conocidos. O, si está buscando la próxima gran novedad en el mundo del bienestar natural y la investigación del cannabis, este debería ser su punto de partida.
Aquí está su guía completa de cannabinoides.
1) Cannabigerol (CBG)
El padre de CBG, CBGA, se encuentra en la cima del árbol genealógico de los cannabinoides, ya que es el precursor químico del THCA, CBDA y CBCA, de los cuales se derivan otros cannabinoides importantes. Se cree que el CBG, no psicoactivo, juega un papel importante en la naturaleza antibacteriana del cannabis.
CBG interactúa con el sistema endocannabinoide de una manera típica de los fitocannabinoides, dirigiéndose a los receptores para reducir la inflamación y el dolor. El CBG también ha mostrado potencial para inhibir el crecimiento de ciertas células cancerosas y para proteger las células del cerebro.
2) Ácido cannabidiólico (CBDA)
CBDA se encuentra en las mayores cantidades en plantas de cannabis y cáñamo crudas que tienen un alto contenido de CBD. CBDA es el precursor ácido crudo del CBD. Cuando se calienta, digamos con una llama o durante el proceso de secado, el CBDA se descompone y se convierte en CBD a través de un proceso conocido como descarboxilación.
Es posible que el CBDA no interactúe con el sistema endocannabinoide, sino que afecte a otras enzimas y receptores. Una de esas interacciones es entre CBDA y las enzimas ciclooxigenasa. Estas enzimas son responsables de la producción de prostaglandinas y reducen la experiencia de dolor e inflamación.
CBDA también puede ser útil en el tratamiento de trastornos del estado de ánimo, como la ansiedad y el trastorno de estrés postraumático (TEPT). Este cannabinoide único también se ha mostrado prometedor como un agente eficaz contra las náuseas, y en un estudio fue incluso mejor que el CBD para reducir las náuseas en los sujetos de prueba con animales.
3) Cannabidiol (CBD)
El cannabidiol ha sido objeto de mucha investigación últimamente. El CBD, que se encuentra más abundantemente en el cáñamo, puede contribuir a una salud y homeostasis óptimas y lo hace sin ninguno de los efectos intoxicantes del THC.
Al afectar indirectamente a los receptores CB1 y CB2, se ha demostrado que el CBD media la respuesta del cuerpo al dolor y la inflamación, protege al cuerpo de los radicales libres y proporciona efectos neuroprotectores. Ya utilizado para el alivio de la epilepsia crónica, el CBD tiene un potencial increíblemente prometedor para su uso en el tratamiento de una variedad de afecciones inflamatorias, neurodegenerativas y relacionadas con el estado de ánimo.

4) Cannabinol (CBN)
El CBN es un cannabinoide interesante porque se crea mediante la degradación del THC y, por lo general, no se encuentra en el cannabis crudo. El proceso en el que se produce CBN ocurre en el siguiente orden:
Efectivamente, el CBN se crea cuando el cannabis se deja durante un período prolongado de tiempo y se expone al aire, la luz y el calor. Esta degradación convierte el THC psicoactivo en CBN, que es un psicoactivo más débil, pero también proporciona un efecto sedante adicional, a veces denominado “efecto sofá”, un beneficio potencial para los insomnes.
CBN es un agonista de los receptores CB2, lo que significa que habilita sus efectos y también interactúa con los receptores TRPV2 que juegan un papel en la inflamación, el metabolismo y el funcionamiento cardiovascular.
5) Cannabicromeno (CBC)
Creado a partir de CBCA después de la exposición al calor o la luz ultravioleta, el CBC es otro de los cannabinoides no psicoactivos que se somete a una extensa investigación para comprender mejor sus posibles beneficios para la salud.
Como muchos otros cannabinoides, se sabe que el CBC alivia el dolor, reduce la inflamación, promueve el crecimiento óseo e inhibe el crecimiento de las células tumorales y combate las bacterias. El CBC parece afectar a los receptores no cannabinoides y es más poderoso cuando se usa como parte de un efecto séquito.
6) Ácido tetrahidrocannabinólico (THCA)
El THCa es el cannabinoide principal que se encuentra en el cannabis crudo y la sustancia de la que se deriva el THC. Cuando se calienta por encima de cierta temperatura, el THCA se convierte en Δ9-THC, el cannabinoide más conocido por su presencia en la marihuana.
Como cannabinoide ácido, como CBDA y CBGA, el THCA inhibe la COX-1 y la COX-2 en gran medida, y es uno de los principales contribuyentes a los efectos antiinflamatorios que se encuentran en el cannabis. También se ha descubierto que el THCA es un antiespasmódico y tiene efectos antiproliferativos sobre las células tumorales.
7) Tetrahidrocannabinol (THC)
El cannabinoide más común que se encuentra en la marihuana, el THC es mejor conocido por sus propiedades psicoactivas. El “subidón” asociado con la marihuana proviene de la reacción que tiene el THC en el cerebro. El THC no solo ofrece intoxicación, también tiene su propia parte de posibles beneficios para la salud.
Como agonista de los receptores CB1 y CB2, el THC es un analgésico que reduce el dolor. Paralelamente, la investigación sobre el THC a nivel celular ha demostrado que tiene propiedades neuroprotectoras y antioxidantes.
8) Tetrahydrocannabivarin (THCV)
Encontrado solo en cepas particulares de cannabis, el THCV es estructuralmente muy similar al THC. Sin embargo, mientras que la molécula de THC tiene un grupo pentilo (5 carbonos), el THCV en cambio tiene un grupo propilo (3 carbonos). Esta diferencia modifica los efectos del THCV, produciendo diferentes efectos en el organismo.
Como antagonista del receptor CB1, se ha descubierto que el THCV suprime el apetito y reduce los ataques de pánico, lo que lo convierte en un cannabinoide particularmente beneficioso en el tratamiento de trastornos alimentarios y afecciones de salud mental. También se ha mostrado prometedor como ayuda para quienes padecen diabetes.